Mira la receta que tenemos para que aprendas a hacer un cheesecake japonés suave y esponjoso. ¡Exquisito!
Desde que salieron las fotos y videos de este postre nión, todos empezaron a compartir su amor por el famoso cheesecake japonés.
Y rápidamente salieron varias pastelerías a preparar este peculiar pan esponjoso que a todos nos encanta.
Pero también sabemos que en ocasiones no podemos viajar tan lejos para probar una de estas creaciones culinarias.
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Así que por ese motivo les traemos la receta para hacer un cheesecake japonés sin morir en el intento.
Lo sorprendente de esto es que no es tan complicado como se podría imaginar, de hecho es más fácil de lo que crees, solo hay que cuidar los detalles. ¿Estás listo? ¡A darle a la cocina!
Receta para hacer un cheesecake japonés suave y esponjoso
¿Qué necesitas?
- 200 gramos de queso crema
- ½ taza de leche
- 50 gramos de mantequilla
- 6 huevos
- ½ taza de harina
- ¼ de taza de fécula de maíz
- ¾ de taza de azúcar
- El jugo de medio limón
- 1 tapita de extracto de vainilla
- 1 cucharadita de ralladura de limón
- 1 pizca de sal
- Azúcar glas (al gusto)
Modo de procedimiento
Lo primero que tienes que hacer es precalentar el horno a 170°. Luego engrasar el recipiente en el que harás el cheesecake japonés.
En un bowl separa las yemas de las claras de huevo y mientras haces los siguientes procedimientos guarda las claras en el refrigerador.
Lo siguiente que tienes que hacer es una olla poner a calentar la leche con azúcar, mantequilla y queso crema hasta que los ingredientes se derritan. Con ayuda de un batidor de globo revuelve bien los ingredientes y retira del fuego. Deja enfriar.
Luego a la misma mezcla añade la ralladura de limón, las yemas de huevo y la pizca de sal y revuelve muy bien con un batidor de globo.
Ahora con ayuda de un colador tamiza la harina y la fécula de maíz y añádela a la mezcla y sigue batiendo hasta tener una consistencia sin grumos.
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El siguiente paso que hay que hacer es sacar las claras del huevo del refrigerador y comenzar a batir hasta que empiece a espumar para después añadirle el jugo de limón y el azúcar. Continúa batiendo hasta que tengas una espuma firme.
¡Ojo! El paso que sigue es importante. Pasa la mitad de la espuma de la clara de huevo a la otra mezcla con ayuda de una pala y haz movimientos envolventes de arriba hacia abajo y repite el mismo paso con la otra mitad hasta que tengas una espuma homogénea del mismo color.
Ahora cocina a baño María de 45 a 60 minutos. Pasado el tiempo deja enfriar dentro del horno tu cheesecake.
Saca y decora con azúcar glas y disfruta de su cremosidad y su dulce sabor. ¡Provechito!
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