Fue en el Hotel Stanley, en Estados Unidos, donde el maestro del terror Stephen King tuvo una pesadilla que lo inspiro a escribir “El Resplandor”
Si eres un fan del terror y del famoso escritor estadounidense, seguro recuerdas el Hotel Overlook. Bueno, pues el macabro sitio donde Jack perdió la cabeza esta inspirado en el Hotel Stanley, sitio que atrapo a Stephen King con sus encantos y sería inmortalizado en su aclamada obra “El Resplandor”.
Situado en Estes Park (Colorado, Estados Unidos), el Hotel Stanley es la fuente de inspiración en el mundo real para el terrorífico Hotel Overlook, lugar donde ocurrieron todos los terribles eventos que el maestro del terror Stephen King nos mostró en su libro “El resplandor” (The Shinning, 1977).
La tercera novela del escritor tuvo lugar después de que en las vísperas de Halloween de 1974, un joven Stephen pasó la noche en ese hotel. Ese día su descanso se vio interrumpido por una pesadilla, que lejos de asustarlo, lo inspiro a escribir una de las más afamadas obras literarias en el mundo.
Tan grande fue su éxito que en 1980 se convirtió en película bajo la dirección de Stanley Kubrick y ahora es considerada una cinta clásica de culto.
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Hotel Stanley: Un mina de oro del terror
La fama del Maestro del Terror es bien merecida y durante años, los operadores del hotel Stanley han sacado provecho a la novela de King. “El Resplandor” y su trama paranormal son como puro oro propagandístico.
Este hotel con una de las vistas asombrosas del Parque Nacional Montañas Rocosas, es una fortaleza económica. Ahora es un centro vacacional que cuenta con un psíquico de planta, ofrece recorridos fantasmales y organiza un festival de cine lleno de “zombies come sesos”.
El dueño de la propiedad, John W. Cullen sabe perfecto que la película de Kubrick es una mina de oro. El hotelero saca provecho de su hotel para convertir al Stanley en sitio con una fuerte conexión con el terror.
Aunque el hotel por sí solo ya era atractivo, los miles de visitantes clamaban por una nueva y necesaria experiencia. El laberinto donde el enloquecido “Jack” Torrance persigue a su pequeño hijo Dany tenía que ser una realidad, para saciar el hambre de los miles de fanáticos del terror.
Fue así que en el aniversario número 20 del hotel, Cullen decidió cumplir la petición de sus huéspedes y construir el famoso laberinto. “La gente quiere la experiencia. Quiere reinterpretarla y contarles a todos sus amigos al respecto. ¿Y quién soy yo para interponerme en su camino?”, declaró en 2015.
Aunque si llegas a visitar este hotel, puedes llevarte una desilusión. Comparado con el laberinto de la película, este es algo más pequeño de lo crees. Mientras que en la cinta los muros parecen medir 10 metros, en el Hotel Stanley apenas llegan al medio metro.
Si quieres saber más de los atractivos del Hotel Stanley, visita su Instagram donde podrás ver a detalle lo que inspiró a Stephen King.