El Camino de Santiago: el viaje espiritual que se hace caminando o en bicicleta
Muchos viajeros no solo están en la búsqueda de aventuras y nuevas culturas, también cuidan la parte del aprendizaje y la espiritualidad.
A unos les gusta viajar a Roma para conocer el Vaticano, otros cuantos quieren ir al Tibet y meditar en sus monasterios, tal vez asistir a algún retiro grupal en la India o Tailandia y a otros más les gusta realizar el Camino de Santiago de Compostela.
Cada año recibe más de 300 mil peregrinos que deciden recorrer a pie, en bicicleta o a caballo este trayecto espiritual, pero ¿en qué consiste?
El Camino de Santiago
El Camino de Santiago consiste en recorrer una senda de 1500 de kilómetros por la península ibérica hasta llegar a la Catedral de Santiago de Compostela, justo ahí es donde termina el viaje que puede durar días, semanas o meses.
Al inicio puedes tener un folleto de todos los pequeños monasterios del lugar y pedir que te los sellen, la idea también es dormir en alguno de estos espacios y entrar en oración, pero si no es lo tuyo, solo puedes pasar por tu sello y continuar. Pero para que sea oficial debes hacer los últimos 100 kilómetros caminando y 200 si lo haces en bicicleta.
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También si no deseas pisar un monasterio en las pequeñas aldeas hay varios albergues en los que te puedes quedar.
De acuerdo a lo que comentan los que han realizado esta travesía, aseguran que es muy especial porque es un camino que se hace en solitario, conviviendo con la naturaleza y el silencio, es un viaje interior muy especial.
Algunos hacen el camino de ida y vuelta, pero otros solo deciden cruzar de extremo a extremo y finalizar su aventura. Cada uno decide cómo hacerlo y durante cuánto tiempo.
Todos los caminos llevan a Santiago de Compostela
Se dice que el Camino de Santiago comienza desde la puerta de tu casa, no importa en qué parte del mundo estés; pero si queremos ser más específicos tenemos que decir que existen diferentes rutas, pero las más populares son las de España, Francia y Portugal.
Por otro lado, si hay algo que caracteriza al Camino de Santiago son los señalamientos el color amarillo que hay pintados en cualquier lado, arboles, piedras, casonas.
La idea fue gracias al sacerdote Elias Valiña quién en 1984 decidió hacer este camino más accesible a los peregrinos que estaban en su búsqueda espiritual. La idea se fue volviendo cada vez más popular y ahora hay varios señalamientos que ayudan a los más neófitos del viaje.
Entre las recomendaciones que hacen los peregrinos, es que lleven ropa cómoda, abrigadora y algún rompevientos para evitar cualquier cambio de clima.
Y lo más importante llevar calzado cómodo lo mejor son las botas especiales para senderismo, pues el camino está lleno de piedras o lodo y necesitas ir lo mejor equipado posible.
La mejor época para realizar el Camino de Santiago es en primavera o verano, porque es cuando encontrarás más albergues abiertos, pero al tratarse de un sendero espeiritual, nunca hay fecha optima para hacerlo, siempre habrá un buen momento.
¿Y, tú ya habías escuchado hablar del Camino de Santiago? ¿Te animarías a hacerlo?
