El Obispo de Ciudad Victoria, Tamaulipas, acusó una falta de fe ante la pandemia por Covid-19 y que “usar cubrebocas es no confiar en Dios”
La fe en tiempos de pandemia. Parece ser que los altos mandos religiosos siguen sin aceptar el peligro mortal que el virus tiene en todo el mundo. El Obispo de la diócesis de Ciudad Victoria (Tamaulipas), Antonio González Sánchez aseguró que usar “el famoso cubrebocas” para evitar que aumenten los contagios de Covid-19, es “no confiar en Dios”.
El famoso cubrebocas es no confiar en Dios, yo entiendo, a lo mejor mañana estoy enfermo, a lo mejor porque no son inmune a nada, pero yo generalmente así como me ven en mi rostro así ando casi siempre
Obispo de Tamaulipas durante la homilía del 14 de febrero
A pesar del polémico comentario, el Obispo aseguró que el no utilizar cubrebocas no es un acto de presunción, sino gracia de Dios. Añadió que no utiliza mascarilla, “por que creo mucho en Dios”. Aunque su actitud es cuestionable, señaló que no va pedirle a los fieles que se lo quiten o no lo usen, pero los invitó a pensar si deben usarlo o no.
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Las declaraciones del Obispo se dieron durante la homilía del 14 de febrero en la Catedral del Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en Tamaulipas. Durante el sermón, el párroco habló acerca de la emergencia sanitaria y la importancia que ha tenido la religión para soportar el encierro y el distanciamiento social.
“Vamos a pedirle a Dios que esto ya pase, deseo fuertemente pronto poder verlos a ustedes sin esa cosa que traen en su cara, lo deseo fuertemente. Yo sé que eso es necesario, lo sé, pero perdónenme lo que voy a decir. Si dice el dicho, ‘Ayúdate que yo te ayudaré’ y me queda muy claro, pero para mí, a nivel personal, el famoso cubrebocas es no confiar en Dios“, declaró González Sánchez.
No conforme con señalar el “error” de los fieles, el religioso aseveró que a aunque sabe que puede estar equivocado, le parece que está faltando fe, “una fe que nos impulse a pedirle a Dios que esto se acabe”.
Como era de esperarse, en las redes sociales surgieron cientos de críticas en contra del Obispo, pero también los comentarios de quienes se manifestaron a favor. Mientras unos invitan al parroco a visitar un hospital de Covid-19 para darse cuenta de la gravedad de su comentario, otros apoyaron sus palabras y cuestionaron el uso del cubrebocas.
