El Diputado Federal electo del PRD, Rogelio Franco intentó rendir protesta a través de una carta enviada al pleno de la Cámara de Diputados.
A pesar de ser acusado por “ultrajes a la autoridad” y estar preso, Rogelio Franco Castán rindió protestas como Diputado Federal del PRD.
Franco Castán, que esta recluido en un penal de Veracruz, rindió protesta por escrito, por lo que la bancada perredista demandó su inmediata liberación. En un hecho inédito, el ex secretario de Gobierno en la administración de Miguel Ángel Yunes envió una carta al Presidente de la Mesa de Decanos, Augusto Gómez Villanueva (PRI), para solicitarle dictar las medidas necesarias para garantizar el pleno ejercicio de sus derechos políticos.
“El que suscribe, Rogelio Franco Castán, por este conducto rindo protesta como integrante de la Sexagésima Quinta Legislatura, esto ante la imposibilidad material de hacerlo debido a encontrarme privado injustamente de mi libertad por las autoridades del gobierno del estado de Veracruz”, se señala en la carta enviada al Pleno de la Cámara.
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Como parte de su carta, Franco Castán dijo que la presunción de inocencia opera a su beneficio, por lo que tiene a salvo su derechos políticos. “Tal como se manifiesta en la constancia de asignación de diputaciones electas plurinominales suscrita por el Presidente y Secretario del INE, que se adjunta en original”, resaltó.
Al respecto, el Coordinador del PRD, Luis Espinoza Cházaro, dijo que la carta se leyó a partir de un acuerdo logrado anoche, en el que participó Morena. Sostuvo que el Poder Judicial veracruzano no puede mantener preso a un diputado federal en funciones y con fuero. También planteó que, una vez electo como Presidente de la Cámara, Sergio Gutiérrez Luna (Morena), tiene que velar por la inviolabilidad del fuero de todos los diputados.
Diputado preso por violencia familiar y ultraje a la autoridad
A Franco Castán se le acusó primero de violencia familiar, por agresiones a su esposa. Cuando fue detenido, forcejeó con los policías y, según la versión de éstos, a uno le rompió la camisa. Ante ello, se le acusó de “ultraje a la autoridad” y a principios de agosto se le giró una nueva orden de aprehensión por supuesta extorsión, abuso de autoridad y actos en contra de la administración de justicia.
