Santos Tuz utiliza tiktok para enseñar maya a otras personas y sus videos se hacen virales
Lo que comenzó como un medio para ayudar a vender los bordados de su abuelita, pronto se convirtió en algo viral y ahora Santos Tuz usa su cuenta de TikTok para enseñar maya.
En una plataforma en la que abundan bailes y retos divertidos, se podría pensar que es casi imposible utilizarla como un medio educativo, sobretodo porque la duración de los videos en dicha plataforma solo es de un minuto.
Pero este joven rompe con los esquemas y nos demuestra que TikTok puede servir para algo más que solo videos de baile o imitaciones y que también puede utilizarse como una herramienta educativa.
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Santos Tuz es originario de Oxkutzkab un municipio ubicado en el estado de Yucatán y desde hace descubrió que hay personas que enseñan pequeñas frases o palabras en otros idiomas como chino, inglés o francés.
Y consciente de que se podía enseñar otros idiomas, Santos decidió enseñar a las personas el idioma con el que se dirige a sus abuelitos, el maya.
Santo graba pequeños videos en el que explica el nombre de los objetos y después lo traduce al español o explica alguna acción a través de imágenes.
Él empieza sus videos hablando maya y después da la explicación para que todos se queden hasta el final de sus TikTok.
En un inicio, Santos utilizó sus redes sociales para ayudar a vender los bordados de su abuelita, pues ella salía diariamente al mercado para vender su trabajo, pero con la contingencia sanitaria que se ha vivido en el mundo ya no hay tanto turismo y ella ya no puede salir a trabajar.
Y como buen nieto, Santos quiso utilizar las redes sociales para dar difusión al trabajo de su abuelita y lo que comenzó con algo sencillo, pronto se volvió en algo viral y él descubrió que también podía enseñar maya a la personas, sobre todo a las nuevas generaciones.
Actualmente Santos Tuz cuenta con 36 mil seguidores en TikTok y está aprovechando la gran popularidad de sus videos para dar mayor difusión a su lengua materna, explicando que el maya está más vivo que nunca.
